El 9 de diciembre, del Dr. en Historia por la Universidad de Alcalá de Henares Don Jesús Carrasco Vázquez, impartió al alumnado de 1º bachillerato científico que participa en nuestro e Twinning, una conferencia sobre los Siglos de Oro.
A continuación os mostramos un resumen elaborado por tres alumnas de 1º de Bachillerato: Paula Fernández Carcedo, Inés Peláez Sáez de Heredia y María Peláez Sáez de Heredia.
"EL SIGLO DE ORO ESPAÑOL
Denominamos Siglo de Oro a la etapa más brillante de la sociedad española. Pero no fue un siglo, no fueron 100 años, sino que excede a cien años. En realidad fueron unos 168 años, desde 1492 (descubrimiento de América) a 1660. Estamos hablando de un marco temporal que cubre todo el XVI y los dos primeros tercios del XVII. En historia estamos ante lo que llamamos siglos largos.
La sociedad europea occidental en el XVI es muy dinámica. Tener en cuenta que el Renacimiento es una revolución mental. Italia es la cuna y Europa la beneficiada. Se están dando los primeros pasos para la formación de los estados modernos. Hay unas dinámicas de cambio político: Cambio de dinastías: de los Trastámara a los Austrias. El matrimonio de los Reyes Católicos había unido dinásticamente Castilla y la Corona de Aragón. Pero el azar juega un papel importante y determinante. Tal fue en el caso de los Austrias, que por orden dinástico no hubieran reinado en España. Resulta que Carlos I de España, el Emperador Carlos V, era hijo de Juana de Castilla, tercera hija de los Reyes Católicos. Pero antes que Juana en la línea sucesoria estaban Isabel y Juan, que fallecieron. He aquí que el azar en forma de muerte convirtió a Juana en reina de Castilla.
Carlos V heredó un vasto territorio. Por vía materna, la Corona de Castilla y el territorio descubierto de América, la Corona de Aragón con la parte de Nápoles/Sicilia. Y por vía paterna, parte de la actual Austria y los Países Bajos. Carlos vivió en continuas guerras y España estuvo en guerra con media Europa. Carlos pasó de ser un borgoñón a hispanizarse y escogió el monasterio de Yuste (Cáceres) para retirarse.
El sucesor de Carlos I fue Felipe II. Este último se enfrenta con firmeza a la disidencia religiosa. Adoptó los acuerdos del Concilio de Trento. Comenzaba la contrarreforma. Su política fue beligerante contra los protestantes y fue proclamado rey de Portugal: Felipe I de Portugal.
A Felipe II le sucede Felipe III. De nuevo el azar jugó sus bazas, ya que él no era el heredero al trono, sino el príncipe don Carlos. Era inestable psíquicamente. Confió el gobierno al Duque de Lerma, personaje inmoral que se enriqueció desde su cargo de confianza.
Ahora bien: si la economía española estaba en crisis, ¿cómo es posible que se produjera el Siglo de Oro en el sentido artístico que se aplica al término? Pues porque el Retiro fue el escenario perfecto que aglutinó tanta vitalidad creadora que encontró su recompensa en el presupuesto de la Corona.
LA SOCIEDAD ESPAÑOLA
La sociedad era desigual y estaba basada en el privilegio. Normalmente, el objetivo de todo el que tuviera dinero era acceder al grupo de la nobleza. Pero abundaba la pobreza y como consecuencia, la mendicidad y los pícaros, personas que tenían que buscarse la vida como pudieran.
Las minorías eran los judíos y musulmanes. Desde 1502 en España no podía existir ningún grupo minoritario. Todos tenían que ser cristianos. En privado muchos de los judíos y musulmanes “convertidos” siguieron manteniendo sus costumbres. Estos falsos conversos fueron objetivo de la Inquisición que actuó con dureza contra ellos.
EL PAPEL SUBORDINADO DE LA MUJER
La mujer ha sido marginada por razón de su género. Los roles los dictaba el varón que los justificaba argumentando la debilidad femenina. Sí hubo mujeres predicadoras en iglesias protestantes que predicaban el evangelio. Pero enseguida se las envió de vuelta al hogar. En el mundo católico ni eso fue posible. Hubo mujeres inteligentes: Santa Teresa de Jesús, por ejemplo, y otras tantas que rompieron el encorsetamiento social. Por ejemplo, aquellas que viajaban a Indias (América española). Fueron capaces de reconstruir sus vidas porque allí una mujer blanca era muy valorada por la sociedad indiana. Las que enviudaban no sentían generalmente la tentación de volverse a casar. Eran capaces de disponer de la hacienda y dirigir la familia. También hubo mujeres comerciantes. Hay algún caso en el que el marido les daba un poder mientras él estaba ausente por viajes. Ahora bien: se les negaba el acceso al comercio y se las formaba para ser un elemento de producción y de reproducción."
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